viernes, 10 de abril de 2009

Poesía y su influencia social

La poesía es música en palabras recibidas por el poeta cuando está inspirado. Tanto la inspiración como los idiomas nacen del misterio de la vida como fenómenos humanos. El misterio es algo inaccesible a la razón y es objeto de fe.
En este Acróstico inicial muestro los integrantes del misterio:
Milagros que yo observé
Inspiración que sentí
Sueños que nunca perdí
Tinieblas que hacen pensar
Energías que se dan
Revelación recibida
Idiomas que oí en mi vida
Ocurrencias que hay aquí
De la combinación de la inspiración y el idioma surge la poe­sía. La inspiración da el contenido y el idioma el embalaje repre­sentado por música en palabras. Vamos a analizar a ambos componen­tes por separado.
Inspiración: es un estado del alma sometida a la influencia de una fuerza sobrenatural que actúa sobre el artista (pintor, escul­tor, arquitecto, músico o escritor). Es decir, es una fuerza creativa que no es exclusiva de los escritores sino de los creadores que transmiten belleza a través de esa fuerza misteriosa que viene del mas allá. En el caso del músico esa fuerza viene en sonidos que también impactarán al alma produciendo sentimientos de ale­gría, tristeza, excitación, somnolencia, etc.
En el caso particular del poeta esa música se recibe en versos que además de producir todos los sentimientos que puede despertar la música tiene toda la información y conocimientos con detalles
que puede dar un buen escritor inspirado en prosa, esto es un pro­feta que anuncia la palabra divina o el futuro por inspiración sobrenatural.
La música, que solo despierta sentimientos no nos da informacio­nes exactas pero la música es universal y repercute en todos los seres humanos y hasta en los animales, muchos de los cuales tienen sus propios lenguajes y hasta su propia música, como trinos y gor­jeos de algunos pájaros. La poesía es musical pero se recibe en palabras del idioma que habla el poeta; es decir, a mayor informa­ción, restringe al sector informado.
Idiomas: son un misterio
Los idiomas son indispensables para la vida humana. El hombre se conoce a través de lo que dice o escribe. La idea de Dios ha influido siempre en el lenguaje. En griego dosis significa "don" y todo idioma tiene una dosis de poesía. Los intentos por llegar a Dios con la pirámide de titanes o con el relato bíblico de la torre de Babel terminaron con castigos consistentes en confusión de lenguas.
En la actualidad reconocemos la existencia de mas de 6.000 len­guas muchas de las cuales van desapareciendo.
Ya se han podido rastrear 11.000 años en la historia de la humanidad y en estos 110 siglos el castellano surgió como lengua recientemente. La primera gramática castellana apareció en el año que se descubrió América, 1492, la escribió Antonio de Nebrija. Es decir que la fijación de normas gramaticales en nuestro idioma nació con América donde el idioma se enriqueció en boca de los conquistadores tomando nombres indígenas de las lenguas locales para nombrar todas las novedades que encontraron.
La fuerza y propiedades de las palabras es por todos conocida: es el arma de la Creación. Dios hizo al mundo con la palabra. La pala­bra puede quedar grabada en cada mente que la escucha, en cada pa­pel o soporte que la estampa sin perder su fuerza o contenido sino multiplicándose, es ubicua y se queda estampada por donde pasa o la dejamos.
Con una poesía se puede comunicar lo mismo que con una prosa pero a diferencia de esta última la poesía tiene musicalidad, es música en palabras cuando se la recita, leerla con la vista es co­nocer su partitura y contenido. Recitarla es apreciar su cadencia, ritmo, rima y armonía que surje naturalmente del poema y correspon­de a la lengua en la cual se expresa.
Grandes poetas como William Shakespeare (1564-1616) en inglés o Johan Wolfgang von Goete (1749-1832) en alemán son apreciados por nosotros como grandes escritores o dramaturgos ya que sus poemas traducidos pierden la magia de la poesía. Habría que entender su idioma original para apreciarlos. Es por eso que aprender un idio­ma es ponerle receptores al alma.
El castellano, o español, como lo estableció la Real Academia de la Lengua en 1925, se expandió desde el Sur de USA hasta Tierra del Fuego reemplazando a mas de mil lenguas tribales halladas en las Américas. Hay 300 millones de individuos en la actualidad que reco­nocen al español como lengua madre de los cuales 20 millones co­rresponden a América del Norte. Nuestros poemas constituyen parte de la dosis poética de la lengua castellana o española.
Personalmente creo que el poeta guiado por inspiración deja men­sajes importantes para el mundo en que vivimos: en este caso la poe­sía es como una ligazón de nuestro ecosistema o realidad, con el misterio, así como lo hace la religión a través de las revelaciones. La poesía nace del misterio y nos lleva hacia él, inclinándonos a la reflexión, a la meditación para entender ese mismo misterio in­crementando nuestra capacidad de pensar y haciéndonos mas humanos, mas sensibles, mas perceptivos y comprensivos, es decir, mejores per­sonas cultivando nuestro espíritu porque nos abre la mente.
La poesía tiene la habilidad de embellecer el idioma transfor­mándolo en una obra de arte: el poema. Cada poeta, como el artista tiene su estilo que lo identifica, porque el estilo conlleva la per­sonalidad del individuo.
Influencia: Pensamientos traducidos en palabras musicales surgi­das misteriosamente del mundo cósmico, constituyen la expresión mas sublime de las actividades humanas e influyen de tal manera en las personas que muchos sienten el deseo de producir este tipo de obras. Surgen así los hacedores de poesía en donde se sustituye la Inspiración por el deseo de expresar algún pensamiento personal, que se­rá el objetivo y jugará con palabras buscando una cadencia rítmi­ca, es decir, ya no es un poeta natural o agraciado que escribe al dictado de la inspiración sino un artista esforzado para obtener belleza en la expresión. Si son habilidosos en hacer el embalaje podrían traducirnos inspiraciones surgidas en otros idiomas para ampliar la gama de nuestros conocimientos.
Los hechos o hallazgos naturales (perlas, antibióticos, etc.) siempre han despertado la inteligencia del hombre que tratará de imi­tar o producir aquello recibido naturalmente:hay perlas artificia­les, antibióticos sintéticos, que no por ser productos del hombre sin mensajes misteriosos son menos bellos o menos apreciados, si después de todo la misma vida y la inteligencia para desarrollarlo están también en el área del misterio.
Los poemas inspirados tienen profundidad de pensamiento, penetran hondo en el alma humana provocando reflexión, llanto, risa, ternura,
compasión, es decir emociona o altera el alma. Esta emoción despertada se graba en forma indeleble en la memoria.
Las palabras son tan poderosas que de acuerdo a lo que signifi­quen en sus frases u oraciones pueden sembrar paz o desorden, amor u odio, moralidad o corrupción, verdades o mentiras, etc. Si es verdade­ra poesía portando belleza pues solo siembra valores positivos.
Si bien la fijación de la palabra o escritura le da permanencia superior a la grabación en memoria de quien la aprende y la preser­va de modificaciones introducidas por transmisiones orales, es el lenguaje hablado ante un auditorio el que cuenta con entonación des­de súplica a amenaza; ademanes, gestos y silencios. Por eso necesita­mos buenos recitadores y el recitar expresivamente es otro arte re­lacionado con la poesía a la cual realza y difunde y es una activi­dad a la cual la poesía hizo nacer.
La poesía nos hará mejores incorporando en nosotros su esencia: la fuerza de las palabras para alcanzar la comprensión, la belleza de la expresión para penetrar en el arte, la musicalidad de la com­binación versal para armonizar los sonidos y además la riqueza de su contenido porque si es poesía verdadera no solo tiene belleza en la expresión sino un contenido que puede transmitir información, sentimientos, pensamientos, creencias, leyendas o hechos de las mas diver­sas cataduras. Me atrevo a decir que aprendí el sentir, pensar y ac­tuar del gaucho de nuestras pampas a través del Martín Fierro de José Hernández y también me quedé enternecida de oír cómo, a través de una poesía un hijo perdona y abraza a su padre en el momento que éste confiesa ser el autor de la muerte o asesinato de su madre: me refiero a "La leyenda del mojón" de Juan Pablo López, ya que el poe­ma le dio la comprensión del por qué y el sufrimiento y la magia de la musicalidad del poema hace que el que escucha preste toda su atención y se enternezca.
La sociedad es la suma de las individualidades, tan diversas, como diversidad de poemas existen. Siempre se encontrará un tipo de poesía que concuerde con el gusto de un individuo.
La poesía enriquece el habla que es el uso practico que el indi­viduo hace de la lengua en que se expresa, enriqueciendo el acervo cultural de la sociedad en que vive. Puede actuar de diversas formas dependiendo de cómo, cuando y a quien llegue además de la difusión que de ella pueda hacerse.
Llega al sector de la población que lee o escucha dentro de la lengua que haya aprendido. En un mundo globalizado como el de hoy, con una población mundial que ya pasó los 5.000 millones, en donde tenemos al mundo en una pantalla con la cual podemos interactuar instantáneamente con cualquier lugar del planeta a través de comunicaciones satelitales, contamos con un privilegio del cual carecie­ron los poetas que nos precedieron.
Si Dios hizo al mundo con la palabra, que es nuestra base de expresión y nos permite difundir lo que somos capaces de recibir o crear,somos los privilegiados que podemos impregnar de poesía al mundo para enriquecerlo psíquica y culturalmente, como individuos y como sociedades en donde podemos sembrar paz, amor, comprensión y sabiduría. Quitaremos así las angustias y temores que nos produce el mismo misterio de la vida que nos está ofreciendo la llave de la felicidad para comprendernos, conocernos y hermanarnos. Si no ¿Qué son estos encuentros de poetas? La misteriosa fuerza de la poesía hoy nos ha reunido en "Ronda literaria" aquí, en la Sociedad Argen­tina de Escritores.
*Parte del texto fue publicado en la revista "Ronda Literaria" nº 40, agosto del 2005 págs 9-11.

No hay comentarios:

Publicar un comentario